El Papa Francisco declaró este miércoles que espera que los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro inspiren a los brasileños a trabajar por un país más justo y seguro.
En declaraciones a peregrinos y turistas en su audiencia general semanal, Francisco instó a los brasileños a “pelear la buena pelea” por un premio que es mucho más valioso que una medalla.
Agregó que ésta es “una civilización en la que reina la solidaridad, fundada en el reconocimiento de que todos somos miembros de una única familia humana, independientemente de las diferencias de cultura, color de piel y religión”.
“Para los brasileños deseo que ésta sea una oportunidad para superar los momentos difíciles y comprometerse a trabajar en equipo para la construcción de un país más justo y más seguro, apostando a un futuro lleno de esperanza y alegría”, dijo el Papa.
Brasil, el país más grande de América Latina, está plagado de corrupción, pobreza, una amplia brecha entre ricos y pobres y crímenes, muchos de ellos de bandas de drogas en las grandes ciudades.
Francisco dijo que espera que los Olímpicos inspiren a todos los brasileños a ayudar a mejorar “un mundo que está sediento de paz, tolerancia y reconciliación”.