El exprimer ministro japonés Shinzo Abe murió luego de recibir un disparo durante un discurso de campaña el viernes al oeste de Japón.
Numerosos testigos presenciales captaron vídeos que se hicieron virales y en los que se aprecia el momento del disparo, que dejó una nube de humo, y a Abe en el suelo siendo atendido por los servicios médicos.
Tetsuya Yamagami, el sospechoso residente de Nara, disparó presuntamente al político con un arma de fabricación casera similar a una escopeta y construida ensamblando varios tubos. La policía registró su domicilio en Nara tras los hechos y halló otros artefactos como pistolas y explosivos.
El exmilitar, desempleado y quien confesó a la policía que había fabricado él mismo todo este armamento, trabajó para las fuerzas niponas entre 2002 y 2005, según confirmó el Ministerio de Defensa de Japón.
Por el momento no han trascendido más detalles sobre las motivaciones de Yamagami quien pese a señalar su descontento con Abe y sus planes para matarlo, dijo también a la policía que “no le guardaba ningún rencor por sus principios políticos”.
Restringido acceso a las armas
El proceso para hacerse legalmente con un arma en Japón es extremadamente difícil.
Aunque hay algunas excepciones, incluyendo para cazar, aquellos que solicitan una licencia están sujetos a controles mentales, de medicamentos e historial criminal.
Además, aquellos que quieren tener un arma deben pasar un día entero de entrenamiento, someterse a una prueba escrita y aprobar exámenes de puntería.
En 2020, hubo 32 muertes atribuidas a armas de fuego en Japón, según el Small Arms Survey, que vigila este tipo de violencia a nivel
global.
Japón tiene 125 millones de habitantes aproximadamente.
Sospechoso del asesinato de Shinzo Abe confesó el crimen, según la policía
El sospechoso detenido por el asesinato del ex primer ministro japonés Shinzo Abe confesó haber cometido el crimen, indicó el viernes un alto responsable de la policía de la región de Nara (oeste de Japón), escenario este viernes del drama.
El sospechoso declaró tener rencor hacia cierta organización, y confesó haber cometido el crimen porque creía que (…) Abe estaba vinculado con ella”, declaró este policía, que rehusó dar más detalles.
Previamente, la policía había indicado que el supuesto asesino de Abe era un desempleado de 41 años, Tetsuya Yamagami, quien aseguró que utilizó un arma de fabricación casera.
Es una afirmación del sospechoso, y hemos determinado que (el arma) es claramente de apariencia artesanal, aunque nuestro análisis está en curso”, señaló a la prensa un policía de la región de Nara.
El ataque contra el político más conocido del país, de 67 años, tuvo lugar en un mitin al aire libre para las elecciones senatoriales del domingo. Japón tiene estrictas leyes contra la tenencia de armas.