FORZAN RELEVO EN EL SNTE.- Todavía no sale la convocatoria, pero la disputa por la secretaría general de la sección 30 del SNTE, está en marcha .
Aquí habíamos advertido, hace poco menos de tres semanas, que el actual dirigente sindical, Rigoberto Guevara Vázquez, hacía esfuerzos por disciplinar a quienes se sienten con méritos para sucederlo, pero no lo consiguió.
La ambición por el cargo rompió los protocolos, forzó y calentó el arranque de la competencia por el principal asiento en el Comité Ejecutivo Estatal.
Así, personajes como Abelardo Ibarra, Francisco Navarro, Jaime Ramos Salinas y hasta Arnulfo Rodríguez, andan en plena campaña de proselitismo entre la base magisterial.
Desafortunadamente para los profes, no se ve entre los aspirantes alguno que tenga un genuino interés por defender las causas del gremio.
En realidad, todos los que buscan la silla principal de la sección 30 lo hacen porque ambicionan el poder económico y político que el cargo representa. Así ha sido siempre y así será.
No es para menos, porque a pesar de todos los candados legales que se han aprobado siguen prevaleciendo prácticas viciadas del pasado, como el tráfico con las plazas y con los movimientos escalafonarios.
Algo que, por supuesto, sólo es posible con la complicidad de los funcionarios de la secretaría de educación.
“FRÍOS, FRIOS”.- En Morena andan desesperados tratando de identificar al “artífice” de los agandalles legislativos que significan piedras en el camino para el próximo gobierno.
Sin embargo, como coloquialmente se dice, “andan fríos, fríos”, en la búsqueda.
Culpan del asunto al abogado y consejero jurídico del gobierno estatal, Abelardo Perales Meléndez, pero no es por ahí.
Don Abelardo fue uno de los talentos despreciados y desperdiciados del gobierno panista. Lo tuvieron relegado, y si acaso lo utilizaron para firmar algunas iniciativas de mediana trascendencia, pero no las que le arrebató a Morena la presidencia de la Junta de Coordinación Política.
Tampoco tuvo que ver en las reformas para quitarle al Poder Ejecutivo instancias de seguridad pública, como el secretariado ejecutivo y la Unidad de Inteligencia Financiera, que fueron colocadas en la estructura de la fiscalía general de justicia del estado.
Si quieren pistas, los morenistas deberían enfocar su búsqueda hacia la secretaria general de gobierno. En esa oficina, su titular, Gerardo Peña Flores, tiene al autor de las polémicas reformas y nombramientos de que se quejan los diputados guindas.
Es un profesionista joven, con un talento nato en derecho parlamentario y dueño de una trayectoria intachable. En todo caso deberían intentar un “fichaje”.
PARTIDAZO.- Morena anuncio el inicio de los trabajos para renovar su dirigencia en Tamaulipas. Se prevé que para el seis de agosto ya haya nuevo presidente del partido.
A diferencia de lo que sucedió en el pasado, cuando el cargo fue despreciado por la pobreza económica del partido, seguramente esta vez sobrarán aspirantes.
No es para menos, porque con Morena en el gobierno habrá bonanza presupuestal para el partido guinda.
Solo basta ver cómo les fue al PRI y al PAN cuando gobernaron Tamaulipas. Los panistas hasta compraron un edificio para establecer su sede estatal.
Bajo esas condiciones, la presidencia de Morena en el estado tendrá tanta importancia como la de un secretario de la administración estatal, y más porque en 2023 arranca el proceso electoral que tendrá su jornada cumbre en el 2024, cuando en lo local los tamaulipecos acudirán a las urnas para elegir alcaldes y diputados.
ENGAÑO. -El alcalde, Eduardo Gattás Báez, anunció, orgulloso, un bono de 10 mil pesos para los trabajadores del municipio. Lo planteo como una especie de compensación por la reducción de 90 a 30 días la prestación del aguinaldo.
Evidentemente se trata de un engaño. Lo que buscan es calmar momentáneamente la inconformidad de los afectados, sabiendo que para diciembre y los años subsecuentes la reducción del aguinaldo quedará firme.
Seguramente los abogados de los burócratas ya se habrán percatado de ello y no se dejarán seducir.
ASI ANDAN LAS COSAS.