Kabul.- El jefe de una importante organización de ayuda dijo el jueves que los talibanes acordaron considerar permitir que las mujeres afganas reanuden su trabajo en la agencia en la provincia sureña de Kandahar, el centro religioso y político de los gobernantes del país.
En diciembre pasado, los talibanes prohibieron a las mujeres afganas trabajar en organizaciones no gubernamentales u ONG, supuestamente porque no usaban el hiyab (el velo islámico) correctamente o no observaban las reglas de segregación de género. En abril, dijeron que la prohibición se extendía a las oficinas y agencias de la ONU en Afganistán. Hay exenciones en algunos sectores, como el cuidado de la salud y la educación.
Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para Refugiados, se reunió con funcionarios en la capital, Kabul y Kandahar, para persuadirlos de revocar la prohibición sobre el personal femenino de la organización.
“Tenemos un acuerdo para iniciar conversaciones inmediatas sobre un arreglo temporal que permitirá a nuestras colegas trabajar con y para las mujeres y otras personas en Kandahar”, dijo Egeland a The Associated Press. “Si obtenemos una exención provincial en Kandahar, deberíamos poder replicarla en otros lugares”.
En enero, los talibanes dijeron que estaban trabajando en pautas para que las mujeres regresaran a trabajar en las ONG. Egeland dijo a principios de esta semana que funcionarios clave le dijeron que están cerca de finalizar estas pautas. Pero no pudieron dar una línea de tiempo o detalles cuando se les presionó.
El arreglo temporal estaría vigente mientras se desarrollan las pautas a nivel nacional. El arreglo provisional cubriría todos los sectores y toda la programación del Consejo Noruego para Refugiados, dijo.
Las agencias de ayuda han estado brindando alimentos, educación y atención médica a los afganos tras la toma del poder por parte de los talibanes en agosto de 2021 y el colapso económico que siguió. Pero la distribución se ha visto gravemente afectada por el edicto de diciembre.
Egeland dijo que dejó en claro a los talibanes que la agencia debe poder entregar ayuda como lo hacía antes de la prohibición, y con mujeres.
Años de diplomacia humanitaria en Afganistán allanaron el camino para los comentarios positivos de Kandahar, con el Consejo Noruego para Refugiados negociando con los talibanes para brindar educación y ayuda en las áreas bajo su control durante la guerra, dijo.
“Sabían que nunca rompimos ninguna regla en términos de la cultura afgana, nos conocemos desde hace mucho tiempo, pero tenemos que ser firmes”, dijo Egeland a la AP.
Insistió en que la organización no empleará equipos solo para hombres ni entregará trabajo de ayuda solo para hombres.
Egeland dijo que existe un acuerdo dentro del Ministerio de Economía, que supervisa a las ONG en Afganistán, de que un acuerdo regional podría abrir el camino a uno nacional.
“Tengo la fuerte sensación de que entienden que si las operaciones de ayuda se cortan por un período más largo, es posible que no regresen. Se dan cuenta de que el tiempo se acaba”.
Los talibanes han dicho repetidamente a altos funcionarios humanitarios que visitan Afganistán desde diciembre que las restricciones a las ONG son suspensiones temporales, no una prohibición.