PREOCUPADO.-El fiscal especializado en combate a la corrupción, Raúl Ramírez Castañeda, debería preocuparse, y mucho, por la denuncia penal que en su contra acaba de formalizar la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica, (UIFE), que tutela Raúl Hernández Chavarría.
Lo acusan de los delitos de ejercicio abusivo de funciones, tráfico de influencias y abuso de autoridad, los cuales habría cometido al beneficiar a su hijo Carlos Emiliano Ramírez Pizarro, su cuñado, Ricardo Pizarro Pizarro, y su colaboradora, Gloria Luz Buendía Mestas, para que recibieran un cargo público dentro de la misma UIFE en el sexenio del panista, Francisco García Cabeza de Vaca, cuando era su titular.
Aunque Ramírez Castañeda se ha dicho inocente de esas imputaciones, sabe perfectamente que demostrar esa ausencia de culpa no es nada fácil cuando toda la maquinaria oficial está en su contra, sobre todo teniendo como su principal enemigo al actual fiscal general de justicia, Irving Barrios Mojica, quien por lo demás en lo único que piensa es en salvarse a sí mismo.
Pero más allá de todo eso, pareciera que la denuncia penal es apenas el inicio de una nueva embestida contra Don Raúl, que podría tener como propósito de fondo colocarlo en una disyuntiva de ¿renuncia o cárcel?
Por eso nuestra afirmación de que, el fiscal anticorrupción debería preocuparse por los cargos que han sido formalizados en su contra, y más aun viendo lo que le acaba de suceder al fiscal general de Morelos, Uriel Carmona, cuyo fuero constitucional fue violentado descaradamente por las autoridades de la ciudad de México, y la Fiscalía General de la República, para ejecutarle una orden de aprehensión por el delito de obstrucción de la justicia.
Eso deja claro que, cuando la justicia se politiza no hay derecho humano que valga.
VOTOS DE AGUA.- La crisis del desabasto de agua en Victoria le costó la alcaldía al PRI y al PAN en su momento, y si no hay solución para antes de la elección de junio próximo es muy probable que lo mismo le vaya a suceder a Morena.
Durante las últimas elecciones, el enojo de los victorenses por el desabasto del vital líquido se ha traducido en votos en contra del partido en el gobierno municipal, y ahora esa indignación es mucho peor porque se les dijo que la situación se resolvería a mediano plazo pero en los hechos todo sigue igual.
El discurso oficial ha sido repetitivo en que todo está listo para iniciar la construcción de la segunda línea del acueducto “Guadalupe Victoria”, lo que, aseguran, será la solución para acabar con la sed de los capitalinos, pero mientras no se vea avance material en las obras la indignación ciudadana estará presente.
Así es que, si Morena quiere tener posibilidades reales de mantenerse al frente del gobierno municipal de Victoria, tendrá que apurarse en resolver el principal agobio de los victorenses.
De nada servirá la pavimentación, ni la mejora en la recolección de basura, mientras el agua siga escaseando en los hogares.
ALCALDE ACELERADO.- En Matamoros, el alcalde, Mario, “La Borrega”, López Hernández, difundió en sus redes sociales los nombres de seis de los aspirantes a sucederlo en el cargo.
Se trata de Víctor García Fuentes, Carlos Ballesteros, Silvia Burgos Sánchez, Yolanda Chavira Estrada, Larisa López Portillo, y el diputado, Isidro Vargas Fernández.
Obviamente el acelere del edil fronterizo no cayó muy bien ni en la dirigencia de Morena y mucho menos en palacio de gobierno.
Sin embargo, está visto que “La Borrega” intenta a toda costa ser el “dedo” ungidor en la candidatura morenista, lo que para muchos es una especie de rebelión sobre las jerarquías del partido guinda.
De paso, el alcalde busca cerrarle la puerta a las versiones de que el junior, Américo Villarreal Santiago, ya tiene propuesta de candidato para ese y otros municipios, incluido el de Victoria.
¿Le permitirán a “La Borrega” heredar su silla? Esa es la cuestión.
ASÍ ANDAN LAS COSAS.
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