Reynosa, Tamaulipas.- Bajo un fuerte operativo de seguridad, las autoridades de Nuevo León entregaron este lunes a sus homólogos de Tamaulipas al enfermero y a las tres mujeres que fueron secuestrados hace más de una semana en la carretera Monterrey-Reynosa, en el tramo Cadereyta-Los Ramones.
La entrega de las víctimas ocurrió exactamente a las 14:36 horas, en el kilómetro 30 de la vía, justo donde convergen ambos estados. Ahí, al pie del letrero que marca el inicio de Tamaulipas, los esperaban agentes de la Fiscalía estatal y familiares.
El convoy de Nuevo León, integrado por vehículos blancos oficiales escoltados por unidades tácticas Black Mamba, partió desde Monterrey tras recibir el alta médica de dos de las víctimas. Fueron trasladados bajo resguardo permanente a Reynosa, donde ya se encuentran en recuperación.
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El secuestro múltiple
Las víctimas fueron secuestradas en dos días consecutivos, en la misma zona:
• El sábado 14 de junio, desaparecieron Natalia Gisela Ramírez Nolasco (50 años), María de la Luz Lara Lara (48) y Teresa Lizbeth Pérez Fuentes (26).
• Al día siguiente, el domingo 15, fue privado de su libertad el enfermero Pedro Antonio Lorenzo Martínez (48), trabajador del Hospital IMSS-270 de Reynosa.
Según informó la Fiscalía de Nuevo León, el secuestro fue cometido por presuntos miembros del Cártel del Noreste, quienes mantuvieron a las víctimas en uno de tres ranchos cateados el pasado martes. Ahí, se hallaron indicios clave que permitieron intensificar la búsqueda por aire y tierra.
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Hallados a 40 kilómetros, golpeados y deshidratados
El hallazgo se logró luego de que ciudadanos reportaran a cuatro personas abandonadas en la orilla de la carretera a General Terán, a unos 40 km de los ranchos inspeccionados. Un convoy policiaco acudió al sitio y logró el rescate.
Los familiares denunciaron que las víctimas fueron golpeadas y sometidas a maltratos físicos y psicológicos. El más afectado fue el enfermero Lorenzo Martínez, quien tenía dificultades para caminar. Por su parte, María de la Luz Lara sufrió una descompensación severa por su condición diabética, agravada por el estrés del secuestro.
Tras su rescate, las víctimas fueron atendidas médicamente. La entrega a las autoridades de Tamaulipas se retrasó hasta que los médicos autorizaron su traslado.
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Vuelven a casa
A su llegada al territorio tamaulipeco, las cuatro víctimas solicitaron ser llevadas directamente a sus domicilios. Tanto la Fiscalía de Tamaulipas como sus familias atendieron la petición. “Ya están en casa. Ahora toca sanar”, expresó uno de los familiares en el sitio.