Una de las veces que el ex gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores quiso acercarlo el dirigente nacional del Partido Verde (PV), con la entonces candidata Claudia Sheinbaum Pardo para hacerlo candidato plurinominal, fue tajante con sus padrinos:
Es impresentable.
Llevaba implícito el veto, la señal no la asimiló el PV ni Geño.
Al parecer el Verde y sus líderes están bien refaccionados por Hernández Flores, porque no han quitado el dedo del renglón.
Aun le dan esperanzas al victorense.
La petición de extradición que pesa sobre su humanidad, sigue vigente. Sólo falta que la Secretaría de Relaciones Exteriores, de el visto bueno para ponerlo en manos de la justicia norteamenicana.
Las acusaciones son pesadas.
La más demoledora: lavado de dinero y mentir al fisco con empresas fantasmas en el giro de bienes inmobiliarios. Así se hizo de varios costosos terrenos y extensas propiedades, en las principales ciudades de Texas.
Si se piensa que sólo en el Verde existe, el veto presidencial, se están quedando cortos: la lumbre llegó a los aparejos de MORENA.
El espinoso asunto de Vector y Alfonso Romo, trae a colación el cuidado que la presidenta tiene en apoyar públicamente a políticos de su partido bajo la lupa de la opinión pública y a los aliados de otros partidos, que en elecciones se coaligan con la IV T para seguir medrando con la cercania del Segundo Piso de ese movimiento.
En Tamaulipas, esa negra historia ha envuelto a buena parte de la clase política tamaulipeca.
Pocas fortunas significativas, se salvan de esa ola que sepultó la moral del actor productivo que representa al capital.
¿A quienes afectará el veto presidencial para el 2027 y el 2030?
Seguramente veremos indicios de la volutad presidencial en las candidaturas del 2027; y dará señales, de cómo su partido postulará candidatos y qué características les exigirá en
2030. Varias ciudades, aspiran ser gobernadas por personajes que portan ropajes similares a los que usa Geño.
Viendo las cosas positivamente, resulta beneficioso ese inédito como soprendente escenario:
inicia la tarea de profilaxis, de la clase política tamaulipeca
¿Qué tan extenso y profundo será el control del proceso de descomposición de la red de autoridad que conduce, esa porción de políticos enfermos?
Sólo la presidenta sabe.
Hasta dónde llegar y hasta dónde no llegar.
Los enemigos de la IV T, no están afuera; o al menos, los más importantes.
Están adentro, cometiendo un acto de insana antropofagia: se alimentan de las vísceras del cuerpo que les dio hospedaje y vida.
