Por: Itzchel Moreno
Las mujeres están tomando la delantera de nueva cuenta, en internet, lo cual podría comprobar que nosotras siempre estamos involucradas en todos los movimientos sociales.
Y debajo de nuestros vestidos hay muchas historias por contar…05
Esta vez no lo han hecho los cuerpos esculturales, que también tienen sus méritos.
Hoy lo hacen las nuevas generaciones de universitarias y las mamas en la red, un grupo de mujeres que están escasas, pero que han aprendido a manejar la seguridad en sí mismas, en complemento con un hombre.
En su mayoría pertenecer a hogares al menos tradicionales, es decir, con un padre, la madre e hijos.
Estas mujeres, madres de familia, cuando viven con salud mental, con el respeto de su pareja y confiadas en su feminidad creada o establecida, con frecuencia reflejan la seguridad de Rachel Hollis, la madre de tres niños que presumió en estas vacaciones su estómago flácido, sin ningún tipo de pudor trabajado en las revistas de moda femenina.
Rachel con una sonrisa abierta se expuso en internet para mostrar su bikini y las secuelas de la maternidad en su cuerpo.
Jade Beall, lo había hecho antes con imágenes de varias mujeres que mostraban los cuerpos sin la intervención delfotoshop en Beautiful Body, la intensión de la artista fue mostrar la otra historia detrás de 100 mujeres y algunos de los hermosos vestidos que contenían bajo la tela, unahistoria de la lucha contra el cáncer, la maternidad, el envejecimiento y hasta los diversos conflictos alimenticios.
Su objetivo: liberar al resto de hombres y mujeres delautosufrimiento.
Mucho antes lo hizo Dorothea Lange, fotoperiodista, quien a mediados del siglo pasado capto los rostros de cansancio y preocupación de las mujeres reales que afrontaban una crisisen Estados Unidos.
¿Cuál es la razón para que Rachel se vuelva viral?, simple, quizá estamos cansados de mentirnos a nosotros mismos y admiramos el valor de otros para salir y mostrar hasta el esfuerzo por bajar de peso.
Por lógica, la perfección no existe, pero si la salud, y por ella debemos tratar y sólo tratar de cuidar los hábitos alimenticios, más no aferrarnos a ser esclavas de la imagen, ni tortúranos entre nosotras con los comentarios frecuentes entre mujeres de: “ Te ves muy … “, recuerda lo que decía “Tambor”, el conejito amigo de Bambi: “Si al hablar no has de agradar, lo mejor es callar”… y vive con libertad.