Ciudad de México.- El investigador y artista de la Universidad de Syracusa (Nueva York), Sam Van Aken, utilizó una antigua técnica de injerto, con la cual pudo modificar árboles que pueden dar más de 40 tipos diferentes de frutas de hueso, entre las que se incluyen melocotones y albaricoques, señala el el blog especializado en ciencias IFL Science. En primavera, del conocido como Árbol de las 40 frutas, brotan frutos rosas y púrpuras. En el verano, comienzan a brotar frutos de otros tipos.
La técnica que usó es el injerto, lo cual requiere de tiempo y un cuidado permanente, porque se debe cortar una parte de una rama e injertar un brote proveniente de una de las variedades de las que se desea tener. Para esto, se debe envolver la rama del árbol con una cinta adhesiva hasta que cicatrice y comience a dar brotes de la especie implantada y crezca su rama.
Sam Van Aken utilizó este proceso durante varios años añadiendo trozos de ramas de diferentes variedades, hasta lograr tener el Árbol de las 40 frutas.
El profesor señala, en una entrevista para National Geographic, que la idea detrás del Árbol de las 40 frutas era plantarlos en lugares donde la gente pueda encontrarlos. El artista y académico indicó que una vez sucediera esto, “las personas se iban a preguntar por qué son las hojas de diferentes formas o por qué tienen colores distintos”.
Peroe ste árbol que está en la Universidad de Syracusa no es el único. Sam Van Aken a desarrollado decenas de este tipo de árbol en varias ciudades de los Estados Unidos, plantándolos en lugares públicos, por ejemplo en museos.. Para el artista y profesor es una forma de expandir la diversidad.