Ciudad de México.- Un informe de inteligencia del gobierno de Estados Unidos cree que la causa por la que se estrelló un avión de pasajeros ruso en el Sinaí, Egipto, el fin de semana, y que cobró 224 vidas, fue por una posible bomba plantada en la aeronave por el yihadista Estado Islámico o una filial del grupo extremista, informó a la cadena CNN un funcionario estadunidense con conocimiento del asunto.
Según el funcionario, “hay una sensación definitiva se trata de un artefacto explosivo que habría sido colocado en el equipaje o en algún lugar en el avión”.
La misma fuente dijo que no había constancia en los informes de inteligencia de amenazas verificadas o creíbles antes del accidente aéreo ocurrido el pasado sábado, pero sí tenían documentos de una actividad adicional relacionada con el Estado Islámico en el Sinaí que habría llamado la atención.
SEGURIDAD. Precisamente, ayer mismo los gobiernos del Reino Unido y de Irlanda informaron de la suspensión de los vuelos con origen o destino a la ciudad egipcia de Sharm el Sheij ante la sospecha de que el avión ruso accidentado haya sido derribado por un “artefacto explosivo”.
“Mientras la investigación sigue en curso, no podemos decir categóricamente por qué se estrelló la aeronave rusa, pero a medida que va saliendo información a la luz nos sentimos más preocupados por la posibilidad de que el avión fuera derribado por un artefacto explosivo”, señaló un portavoz de Downing Street.
Como “medida de precaución” ante ese escenario, Londres dispuso que los vuelos hacia el Reino Unido procedentes de Sharm el Shaij, el aeropuerto de donde partió el Airbus A-321 siniestrado, sean “retrasados esta noche”.
Eso permitirá a un equipo británico de “expertos en aviación”, que ya se dirige hacia la ciudad egipcia, “evaluar las medidas de seguridad en el aeropuerto e identificar cualquier acción que sea necesaria”.
HIPÓTESIS. Por su parte, las autoridades de aviación irlandesas se sumaron a la medida del Reino Unido y ordenaron que las aerolíneas del país no vuelen sobre el área de Sinaí hasta tener más información sobre las causas del accidente.
La residencia y despacho oficial del primer ministro británico, David Cameron, indicó asimismo que el jefe del gobierno se reunirá en las próximas horas con el comité de emergencias Cobra para evaluar la situación.
Egipto ha descartado la hipótesis de un ataque terrorista, mientras que el director nacional de Inteligencia de Estados Unidos, James Clapper, dijo hace dos días que no hay ninguna “evidencia directa” de terrorismo en la catástrofe aérea.
Con todo, la rama egipcia del Estado Islámico insistió ayer en su reivindicación del derribo del avión ruso, aunque no ofreció detalles sobre cómo se hizo.
CAJAS NEGRAS. El avión accidentado, un Airbus A321 de la compañía rusa MetroJet (Kogalymavia), que cubría la ruta entre la ciudad egipcia de Sharm el Sheij y San Petersburgo, se estrelló en una zona desértica del Sinaí, a los 23 minutos de haber despegado y cuando volaba a 31 mil pies (9 mil 400 metros) cuando desapareció de las pantallas de radares. Las autoridades insisten en que no hubo avisos ni llamados de emergencia de los pilotos.
Por otra parte, expertos ya vaciaron el contenido de las cajas negras de la aeronave y los datos “se encuentran en buen estado” y serán analizados por el equipo de investigación en los próximos días, informó el ministro egipcio de Aviación civil, Husam Kamal a la agencia oficial Mena.