Ciudad de México.- Esta tarde en la calurosa y peligrosa ciudad hondureña de San Pedro Sula, México continuará su andar dentro de la eliminatoria rumbo a la Copa del Mundo de Rusia 2018, visitando a la otrora complicada y poderosa escuadra de Honduras, tratando de no solo de sumar tres puntos más en el cuadrangular de la cuarta fase de la eliminatoria de la Concacaf, sino además, tratando de recuperar el respeto que hace muchos años los centroamericanos dejaron de tenerle al equipo mexicano.
El Tri llega precedido de la victoria ante la escuadra de El Salvador al son de 3-0 en el debut de Juan Carlos Osorio como técnico del equipo nacional, mientras que los hondureños fueron derrotados por Canadá 1-0 en Vancouver, lo que sólo sirvió para alargar la racha de malos resultados de Jorge Luis Pinto al frente del equipo catracho, con el que no ha conseguido una sola victoria en un partido oficial, pues sufrió dos derrotas en la Copa Oro ante Estados Unidos y Haití, y sólo empató a uno ante Panamá.
Además de lo anterior, Honduras este año, desde que el colombiano se hizo cargo del equipo, suma apenas dos victorias, una ante El Salvador y otra ante Venezuela, en 10 partidos amistosos, en los que está incluido el empate ante México el 1 de julio pasado, una semana antes de que iniciara la Copa Oro.
Lejos parecen estar los tiempos en que el cuadro hondureño estaba plagado de jugadores que le hacían daño a México, como Carlo Costly )máximo anotador contra México con 6 goles) y Carlos Pavón (5 tantos ante el Tri), lo que permitió alargar a cinco el número de visitas aztecas a San Pedro Sula en donde el Tri sólo rescató un empate con sabor a derrota, cuando dejó escapar en la eliminatoria pasada en marzo del 2013, una ventaja de 2-0 con goles del Chicharito Hernández.
Incluso en la eliminatoria rumbo a Sudáfrica queda ese 3-1 tatuado en la frente, cuando el equipo comandado por Sven Goran Eriksson fue arrasado y llegó a estar 3-0 abajo en el marcador antes de que un penalti marcado a, y cobrado por el mismo Nery Castillo hiciera un poco más digno el regreso a casa.
De hecho, el equipo mexicano no gana un partido en territorio hondureño desde que se impuso con un categórico 4-1 en el Estadio Metropolitano de Tegucigalpa el 2 de mayo de 1993 cuando Miguel Mejía Barón comandaba al equipo nacional, en su ruta a la calificación para el Mundial de Estados Unidos 94.
Ya en estos tiempos, Juan Carlos Osorio que ha propuesto una revolución en el futbol mexicano, se pasó el fin de semana resolviendo su crucigrama sin llegar a ofertar algo realmente extraordinario para encarar a los centroamericanos, y ante la lesión de Jorge Torres Nilo, no hubo un llamado alternativo, sino un extraño experimento de poner a Héctor Herrera como lateral por izquierda, en vez del universitario Luis Fuentes, lo que llamó, por supuesto, notoriamente la atención, en una propuesta e imaginaria línea de 5 que no ha sido confirmada, pues el técnico nacional lo hará hasta unos minutos antes de que comience el partido.
La victoria del pasado viernes ante El Salvador pareció no servir de mucho a las ideas del técnico nacional, quien sin aceptar que jugará con mayores precauciones, se estima que si dará entrada a tres defensas centrales, y en sus ajustes veremos si se confirman los rumores, que incluyen la presentación de Jonathan dos Santos de inicio, y cual será la decisión del tercer central, por izquierda, que sigue siendo parte de las aparentes dudas del técnico del equipo mexicano.
Otro de los cambios que podría haber considerado Osorio, es dejar en la banca de inicio al Chicharito, manteniendo a Oribe Peralta con Jesús Corona y Carlos Vela, pero todo son especulaciones.
El duelo se jugará a las 3 de la tarde hora local, mismo tiempo en el centro de México, con una humedad muy elevada, pero aparentemente no con la temperatura muy elevada, superior a los 35 grados, que esperaba la Federación Hondureña que se diera y que influyera en el rendimiento del equipo mexicano.