Ciudad de México.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, confirmó ayer, en un inusual mensaje a la nación, que la matanza de San Bernardino fue un acto terrorista cometido por dos simpatizantes del Estado Islámico, pero descartó cambiar su estrategia de bombardeos intensivos sobre objetivos de esa organización yihadista, por lo no enviará tropas sobre el terreno a Irak ni a Siria.
“No deberíamos implicarnos una vez más en una guerra sobre el terreno larga y costosa en Irak o Siria”, subrayó Obama en un discurso televisado a la nación desde el Despacho Oval de la Casa Blanca en horario de máxima audiencia, con el quiso demostrar la máxima implicación de Estados Unidos en el combate a la amenaza yihadista.
“Eso es lo que quieren”. “Eso es lo que grupos como el EI quieren. Saben que no nos pueden derrotar en el campo de batalla, pero ellos también saben que si ocupamos sus tierras extranjeras, pueden mantener insurgencias durante años, matando miles de nuestros soldados y consumiendo nuestros recursos, y usando nuestra presencia para atraer nuevos miembros”, declaró Obama.
El presidente estadunidense defendió la “estrategia” actual marcada por el Pentágono contra el EI, consistente en “ataques aéreos, fuerzas especiales y el trabajo con fuerzas locales que están luchando para recuperar el control de su propio país”.
“Así es cómo conseguiremos una victoria más sostenible, y no requerirá enviar a una nueva generación de americanos a luchar y morir durante otra década en territorio extranjero”, zanjó el mandatario norteamericano.
Ya el pasado día 1, el secretario de Defensa Ashton Carte adelantó que EU van a reforzar los contingentes de fuerzas especiales en Siria e Irak, para tratar de “motivar” más a las tropas locales que combaten al EI, si bien no se contempla el despliegue masivo de tropas terrestres.
Actualmente, más de 3 mil militares estadunidenses están en misión en Irak, en su mayoría dedicados a dar asesoramiento y entrenamiento a las fuerzas locales.
Hace un mes, Obama autorizó el envío a Siria de un contingente de las Fuerzas de Operaciones Especiales, inferior a 50 miembros, para asesorar a los opositores al régimen del presidente Bachar Al Asad en la lucha contra los yihadistas.
“No es islam”. Sobre el ataque del miércoles pasado en en San Bernardino (California), en el que murieron en un centro de discapacitados 14 personas y otras 21 resultaron heridas, tras ser tiroteadas por el estadunidense Syed Farook y su esposa paquistaní Tashfeen Malik, Obama confirmó que se trató de un atentado terrorista cometido por simpatizantes del Estado Islámico.
Sobre esa organización, el mandatario demócrata trató de cortar en seco un probable repunte de la islamofobia en el país, alentada por comentaristas conservadores y aspirantes republicanos a la presidencia, asegurando que los yihadistas “sólo representan una pequeña fracción de más de mil millones de musulmanes en todo el mundo”, incluyendo a millones de “patriotas estadunidenses musulmanes que rechazan su ideología de odio”.
“Matones asesinos”. Obama calificó a los miembros del EI como “matones y asesinos” que “forman parte “de un culto a la muerte”, y llamó a no confundir a los radicales con el resto de musulmanes, quienes —advirtió— “también sufren sus atrocidades”.
Subrayó que el EI “no habla en nombre del Islam” y prometió su destrucción, apelando a que “la libertad es más poderosa que el miedo”.
“Destruiremos al Estado Islámico”, afirmó Obama desde el Despacho Oval, pero para lograrlo, señaló, es necesario contar con las comunidades musulmanas como “los aliados más fuertes”, en lugar de desdeñarlos con “la sospecha y el odio”.
Para ello, remarcó, los líderes musulmanes de todo el mundo “tienen que rechazar con decisión y de manera inequívoca la ideología de odio que grupos terroristas como el EI y Al Qaeda han promovido”.
“La amenaza del terrorismo es real, pero vamos a superarlo. Vamos a destruir al EI y a cualquier otra organización que trate de hacernos daño”, aseveró el mandatario.
“Nuestro éxito no dependerá del abandono de nuestros valores ante el miedo. Eso es lo que grupos como el EI están esperando. En su lugar, vamos a prevalecer por ser más fuertes e inteligente, fuertes e implacables”, agregó.