Lo bueno de lo malo. – A pesar de la pesadilla que sigue representando para toda la pandemia del Covid-19, en Tamaulipas podemos sentirnos afortunados porque la situación no ha hecho crisis como en Nuevo León, la Ciudad de México y otras entidades del país.
Ni en el “pico” más alto de contagios la capacidad hospitalaria se vio rebasada. De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en estos momentos la ocupación apenas está por encima del 45 por ciento.
Otro dato revelador es la ocupación de ventiladores. De los poco más de 400 de que se dispone en el sistema de salud, apenas están ocupados 22.
Hagamos votos para que así sigamos, pero también hagamos conciencia cada quien, en lo personal, para extremar precauciones y evitar con ello convertirnos en una víctima más del virus.
Ya nos han dicho las autoridades que, con la llegada de la nueva cepa del coronavirus, el riesgo de contagio se potenció, por lo que la única alternativa disponible es que nos cuidemos.
Evitemos llegar a los extremos de nuestros vecinos neoloneses, cuyos hospitales ya no tienen cupo.
Cumpleaños desangelado. – Este próximo 5 de febrero cumple sus primeros cien años la Constitución Política de Tamaulipas.
Lamentablemente, la fecha histórica coincide con la peor pandemia que ha azotado a la humanidad, lo cual hará imposible la realización del gran festejo que se había proyectado desde el año pasado.
Será inevitablemente un festejo bastante desangelado. Si acaso se desarrollarán algunas conferencias difundidas por vía internet y uno que otro discurso oficial, pero nada que se parezca a lo que se tenía planeado.
Por supuesto que también deberá esperar mejores tiempos el proyecto de los diputados locales para actualizar el texto Constitucional.
Vale recordar que incluso fue conformada una Comisión legislativa especial para que se encargara de los trabajos de reforma.
Es una lástima que no se vaya a concretar la modernización de nuestra Carta Magna, porque la verdad que una gran parte de su contenido es por completo obsoleto y no responde a las necesidades actuales de la sociedad.
De regreso a sus curules. – Mañana viernes regresan a sus curules los 36 diputados que integran la Sexagésima Cuarta Legislatura del Congreso del Estado.
Iniciarán el último periodo ordinario de sesiones de su ejercicio. Recordemos que la actual legislatura es de dos años y concluye el 30 de septiembre próximo.
De esa manera, los legisladores vuelven a su curul para sesionar del 15 de enero al 30 de junio. Después iniciarán un receso y solo volverán para cederle sus asientos a quienes a partir del uno de octubre integrarán la Sexagésima Quinta Legislatura.
Vale decir, sin embargo, que más de la mitad de los actuales 36 diputados traen intenciones de buscar una diputación federal, una Alcaldía, o por lo menos repetir como legislador local por otros tres años. No hay que olvidar que tienen derecho a la reelección.
“Si me hundo yo, se hunden muchos”. – A más de tres meses de que fue echado de la Alcaldía de Victoria, nada se sabe sobre alguna investigación formal en contra de Xicoténcatl González Uresti.
El hombre despacha despreocupadamente en una Subsecretaria de Salud estatal, y presume a propios y extraños que nada le sucederá.
“Si me hundo yo, se hunden muchos”, alardea amenazante el edil con licencia, para insistir en que nada le ocurrirá.
Si eso llega a ocurrir realmente, de que González Uresti reciba impunidad por tantas corruptelas en los dos años que gobernó a Victoria, será una terrible ofensa para los victorenses. Esperemos que no sea así. Por el bien del PAN.
ASI ANDAN LAS COSAS.