(Agencia)
Ciudad de México. – Hoy se cumple un año de la muerte de Gabriel García Márquez (1927-2014), quien con su pluma dejó huella en muchas generaciones con títulos como Cien años de soledad y, no obstante su ausencia física, su obra recobra fuerza entre nuevos lectores jóvenes, pero también al hacer que su público cautivo se interese cada vez más en él.
“Es una pena que tenga que morir alguien para volver a ser leído, pero lo cierto es que su partida atrajo más lectores jóvenes a sus obras”, señaló a Crónica Benito Taibo, quien se ha dedicado a dar charlas a este sector de la población sobre Gabo.
Agregó que una de las razones por las que el público juvenil se acerca cada vez más a libros como El amor en los tiempos del cólera, es porque en ellos encuentran la “palabra homérica”, al adentrarse en su mundo literario y encontrar en él situaciones cotidianas.
“García Márquez es de esos titanes que se sube a un barco y recorre el mundo para adentrarse en diferentes aventuras, las cuales presenta con absoluta cotidianidad a sus lectores (…) es capaz de embelesar sin demasiados fuegos artificiales en cuanto al lenguaje, pero sí en cuanto a la estructura narrativa”, agrega Taibo.
Uno de los lectores de esas aventuras es Rodrigo Mena Vargas, estudiante del último año de preparatoria con 19 años edad. Como algunos de sus amigos, dice que después de la muerte del Premio Nobel de Literatura de 1982 comenzó a tomar en serio su nombre y obra.
“Antes de que muriera obviamente sabía que era un escritor, pero la verdad es que hasta que murió y leí realmente todo lo que hizo, quién fue, el estilo que tenía y los títulos de novelas que alguna vez había escuchado, fue que me llamó la atención leerlo”, comenta el joven.
Pero también hizo que muchos de sus antiguos lectores, quienes crecieron con él, se interesaran por releer sus novelas y otra vez dejarse envolver por el realismo mágico que impregna los escenarios fundados por García Márquez, como el legendario Macondo.
Irasema Iturralde tiene 37 años, ahora es casada y cuida a su hijo Benjamín, sin embargo en su etapa estudiantil fue de los lectores que siguieron a García Márquez con “entusiasmo y constancia”, para dejarlo después en el librero de su casa.
“Cuando murió sentí mucha nostalgia; saber que era colombiano y que adoptó a México para vivir, recordar mis experiencias con sus libros, las diferentes etapas de mi vida donde me acerqué a ellos, pues eso sin duda hizo que fuera a buscar el libro y releyera las novelas que me conmovieron siempre”, cuenta Irasema Iturralde.
“Es un gran narrador de historias –dice Benito Taibo–, que no se pierde en los vericuetos de las palabras y siempre está ahí, atento para volver a enganchar, llevar al lector a donde él quiere y soltarlo para volverlo a enganchar en esos territorios mágicos”.
Concluye que mientras siga existiendo civilización y se continúen escribiendo libros, la obra de García Márquez vivirá y seguirán surgiendo sus lectores.
COLOMBIA MANTIENE VIVO A GABO. Mientras que en México aumentan los lectores de Gabriel García Márquez por su descubrimiento y la nostalgia, en Colombia también crece el número de jóvenes, quienes se acercan como una forma de “reconocer su pasado”.
Juan Camilo Rincón, periodista colombiano especialista en García Márquez, señala que los jóvenes se acercan a la obra del escritor como una forma de preguntar sobre el pasado de América Latina, donde encuentran una respuesta ante la rebeldía de hoy.
“Gabo logró describir perfectamente nuestra idiosincrasia; revelaba de forma casi exacta nuestra forma de pensar, sentir y crear como colombianos y latinoamericanos. Me atrevería a decir que para muchos no hay forma de vernos sin reflejarnos en su obra”, abundó el especialista.
En este sentido, agrega que la obra de Márquez siempre ha estado viva y tendrá “una fuerza extraordinaria para perdurar por los siglos. Su muerte impulsó la reimpresión de su obra y nuevos análisis y miradas sobre ella, lo cual nos seguirá maravillando y dando elementos para releer”.
Por esta razón, agrega Rincón, nunca serán muchos los homenajes que se le rindan en Colombia, “por lo pronto en la Feria Internacional del Libro de Bogotá se le recordará de forma peculiar, pues a diferencia de otros años donde hay un país invitado de honor, esta vez será Macondo”.
EVOCACIÓN A GABO. 180 librerías de México y Sudamérica realizan, desde el pasado 13 de abril, actividades para conmemorar a Gabriel García Márquez, que en la ciudad de México terminarán el 26 de abril.
Entre los eventos: lecturas en voz alta, y dramatizadas, de fragmentos de obras y cuentos, así como mesas de diálogo con escritores como Benito Taibo, Rosa Beltrán, Élmer Mendoza y Xavier Velasco.
Estos mismos escritores rendirán homenaje a García Márquez en la Fiesta del Libro y la Rosa, evento que coincide con los 30 años de El amor en los tiempos del cólera, por lo que también habrá proyecciones cinematográficas de ésta y otras de sus novelas adaptadas al cine.
Por otra parte, en Carrera 10 esquina con Avenida Jiménez, en Bogotá, Colombia, fue inaugurado un mural con la imagen de Gabriel García Márquez, como parte de los múltiples homenajes que en la capital se han hecho al escritor nacido en Aracataca.
Mientras tanto, el domingo 19 de abril a las 23:00 horas se estrenará en México, en el canal Discovery Channel, el documental Gabo, donde se narra la vida del autor de Crónica de una muerte anunciada.