Ciudad de México.- En tragedia terminó una fiesta de bienvenida a un menor sirio de tres años que sería acogido en la ciudad de Eschweiler, junto a Aquisgrán, en el oeste de Alemania, y quien murió ayer de forma al parecer accidental, informaron las autoridades.
De acuerdo con las investigaciones en marcha, el menor se había colocado sobre un cable que pendía entre dos columnas con plantas, a 1.4 metros de altura.
Una de las columnas cedió y aplastó al menor, aparentemente de forma accidental y sin intervención de terceros, según las informaciones aún parciales de la fiscalía y a la espera de los resultados de la autopsia del infante.
La fiesta había sido organizada a iniciativa privada por un restaurante local para dar la bienvenida a los refugiados que están llegando al país.
De acuerdo con los reportes de la fiscalía, el niño había sido registrado como de nacionalidad siria y se omitió su nombre mientras se desarrolla la investigación por esta tragedia.