Ciudad de México.- ¿Hay optimismo entre Colombia y las FARC con lo que hasta la fecha han logrado?
—“Hay mucho optimismo. En estos tres años se ha avanzado hasta un punto que nunca se había llegado en la historia de los procesos de paz con las FARC. Se ha llegado a consensos sobre reforma rural, participación en política y sobre el tema de las drogas ilícitas. Actualmente las partes dialogan sobre los mecanismos de justicia, que permitirán juzgar y sancionar a los responsables de los graves crímenes cometidos durante el conflicto armado; es importante resaltar que, en el centro de todo el sistema de justicia transicional que se está construyendo, están las víctimas del conflicto armado, para garantizar que sus derechos serán respetados”.
—¿En qué nivel de porcentaje se encuentran estos acuerdos para dar por terminado todo esto?
—“Quedan por definir unos pocos temas en materia de Jurisdicción Especial para la Paz, se ha avanzado mucho en lo relacionado con la reparación de las víctimas y está pendiente el acuerdo sobre dejación de armas, desmovilización y reintegración; desde el punto de vista porcentual, podría decirse que lo ya acordado corresponde a un 80%”.
—¿Por qué el acuerdo de paz entre Colombia y las FARC hasta hoy no se ha podido dar en su totalidad?
—“Un proceso de paz, como su nombre lo indica, no es un acto único; por eso no se le debe confundir con el documento de acuerdo final cuya firma está prevista para el 23 de marzo de 2016.
—¿Usted ha hablado de cinco puntos importantes para que este acuerdo se lleve a cabo, cuáles son esos cinco puntos específicos?
—“Son los cinco puntos acordados en el 2012 entre el Gobierno y las FARC como objeto de discusión en la mesa de negociación: (1) reforma rural integral, (2) participación política, (3) drogas, (4) víctimas y (5) fin del conflicto”.
—¿Cuáles son los beneficios específicos que traerá este acuerdo de paz y quienes seríanlos beneficiados con esto?
—“Las principales beneficiadas serán las víctimas del conflicto, porque verán garantizados sus derechos a la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición; eso no es un logro menor, cuando sabemos que un 15% de los colombianos hemos sido víctimas de este conflicto. De manera más general puede decirse que el solo hecho de que se ponga fin a la espiral de violencia que acompaña el conflicto, es ya un beneficio para todos; no puede perderse de vista que las personas de mi generación no hemos vivido un solo día en paz.Adicionalmente debe decirse que la firma de la paz traerá mayor equidad para el país, mejorará la calidad de vida de todos sus habitantes, e incrementará las posibilidades de desarrollo económico”.
—¿Cómo es la imagen de seguridad que actualmente tienen los colombianos de su país?
—“La seguridad sigue mejorando en Colombia como fruto del esfuerzo del Gobierno en los últimos cinco años. Las etapas de esta negociación en las que se ha cumplido el cese unilateral del fuego han sido los momentos más pacíficos, con menor tasa de homicidios en más de 40 años; esto quiere decir que cada vez estamos más lejos de la guerra y más cerca de la paz”.
—¿Cuál es su opinión acerca que las declaraciones que el ex presidente Álvaro Uribe ha hecho en torno a esto?.
—“El gobierno colombiano ha estado atento, y seguirá estándolo, a todas las voces que, desde posiciones críticas o de respaldo al actual proceso de paz, representen una contribución al propósito común que, estoy seguro, perseguimos todos los colombianos; alcanzar la paz”.
