Ciudad de México.- El Senado estableció que las televisoras públicas, educativas y culturales, así como las estaciones de baja potencia o complementarias, podrán posponer, por un año máximo, la transición a la televisión digital terrestre.
Además, queda prohibida la entrega de televisiones, como parte del apagón analógico, en periodo electoral.
El dictamen, que ayer fue presentado en primera lectura y, tres horas después se dispensó la segunda lectura para pasar de inmediato al debate, señala que los permisionarios o concesionarios de uso público o social, incluyendo las comunitarias e indígenas, que presten el servicio de radiodifusión que no estén en condiciones de iniciar transmisiones digitales al 31 de diciembre de 2015, deberán, con anticipación a esa fecha, avisar al Instituto Federal de Telecomunicaciones para que se les autorice la suspensión temporal de sus transmisiones o, en su caso, reduzcan su potencia radiada aparente para que les sea aplicable el programa de continuidad. Los plazos que autorice el Instituto en ningún caso excederán del 31 de diciembre de 2016.
El texto, aprobado por 70 votos favor, 15 en contra y una abstención (con voto dividido entre el PRD y el PAN) y que fue enviado a la Cámara de Diputados, añade que en caso de que para las fechas de conclusión anticipada de las señales analógicas de televisión radiodifundida por área de cobertura o de que al 31 de diciembre de 2015 las actuales estaciones de televisión radiodifundida con una potencia radiada aparente menor o igual a un kilowatt para canales de VHF y 10 kilowatts para canales de UHF, no se encuentren transmitiendo señales de televisión digital terrestre y/o no se haya alcanzado el nivel de penetración, ya sea en alguna región, localidad o en todo el país; el Ifetel deberá establecer un programa para que la población continúe recibiendo este servicio público en las áreas respectivas, en tanto se inicien transmisiones digitales y/o se alcancen los niveles de penetración.
Señala que los titulares de las estaciones deberán realizar las inversiones e instalaciones necesarias, conforme a los plazos previstos en el programa y advierte que en ningún caso las acciones derivadas del programa excederán al 31 de diciembre de 2016.
Javier Corral dijo que el dictamen “nació para beneficiar a dos empresas de televisión comercial, para exentarlas de sanciones por el incumplimiento de inversiones en términos de digitalización de las estaciones complementarias de radiodifusión comercial, cuya concesión está mayoritariamente en manos del duopolio de la televisión, el 93.4 por ciento pertenece a Azteca y a Televisa; el 6 por ciento pertenece a permisionarios”.
La perredista Dolores Padierna señaló que la iniciativa surgió ante la intensa presión y cabildeo de la televisora más importante del país y de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión para postergar el apagón analógico.
Refirió que “los datos del Ifetel advierten que los principales beneficiados de la iniciativa no serán los medios públicos, sino el duopolio televisivo”.