Por Eduardo Piali
Nuevo LAredo, Tamps.- En Nuevo Laredo, los juicios orales están lejos de volverse una realidad, pues de acuerdo a la Barra de Abogados, el recinto donde se deben llevar a cabo estos procesos no se ha construido, el 90 por ciento de los litigantes en la ciudad no están capacitados y no hay jueces suficientes que puedan tomar casos de orden mercantil, laboral ni penal.
Rodolfo Valentino Vara Núñez, presidente de este organismo, explicó que los esquemas judiciales deberán pasar a esta modalidad antes de junio de 2016, la cual resultará más cara para los ciudadanos que quieran contratar un jurista privado.
Sin embargo, debido a que no se ha concretado esta migración hacia este nuevo sistema, tanto abogados como jueces y el mismo personal de las cortes sigue sin llevar a la práctica sus nuevos conocimientos, lo que podría derivar en numerosas confusiones y problemáticas.
“Nosotros, en la Barra de Abogados, somos cerca de 200 miembros, de los cuales aproximadamente 50 nos estamos preparando con diversos cursos que pagamos nosotros mismos, otros que nos ha ayudado el tribunal de justicia al impartirlo de forma gratuita. (…) Necesitamos prepararnos bastante y nos hace falta la práctica”, reconoció el litigante, afirmando que en la ciudad podría haber entre 300 y 500 abogados en total.
Las salas donde se deberían llevar a cabo los juicios orales deben ser adaptados con distintas salas con sus respectivas entradas, por cuestiones de seguridad. Además, se requerirá de un escribano, un camarógrafo y un relator que esté dentro de la sala para documentar cada uno de los juicios.
Vara Núñez explicó también que antes de llegar al proceso del juicio penal acusatorio se dividirá en tres distintas etapas, donde las dos primeras, se buscará un acuerdo compensatorio entre las dos partes.
El problema, según el presidente de la Barra de Abogados de Nuevo Laredo, es que en esos dos primeros procesos se van a requerir jueces distintos, y de llegar al juicio oral se van a requerir tres más: un presidente, un secretario y un vocal. Pero en la ciudad sólo hay tres jueces capacitados para llevar a cabo dicho proceso.