Ciudad de México.- Tras 15 días de permanecer en silencio, el jueves por la noche la nave Philae se volvió a comunicar con el orbitador Rosetta. Fueron 12 minutos los que duró el enlace y “demuestra que al menos una de las unidades de comunicación del aterrizador permanece operativa y recibe nuestras órdenes”, dijo Koen Geurts, miembro del equipo de control de módulo de aterrizaje en DLR Colonia.
El Philae no había dado señales de vida desde el 24 de junio, y los equipos de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), responsable del robot, empezaba a preocuparse.
El científico explicó que “el equipo de trabajo nunca se dio vencido con Philae y estuvimos optimistas”. Cuando se restableció la comunicación, hubo gran emoción, añadió. Adelantó que se están evaluando los datos recibidos. “Ya podemos ver que el instrumento CONSERT se activó con éxito por el comando que le enviamos el 9 de julio”, dijo.
Sin embargo, indicó que aún no se tiene una explicación de por qué el módulo de aterrizaje nos se había comunicado en los últimos días, hasta que lo hizo la pasada noche del jueves”.
Es “una noticia muy esperanzadora para la continuación de la misión de Philae” puesto que el cometa 67P/Churymov-Guerasimenko llegará a su perihelio (el punto más cercano al Sol) en la noche del 12 al 13 de agosto próximo, añadió.
Tras siete meses de hibernación, el robot-laboratorio se despertó el 13 de junio y, desde entonces, apenas había logrado realizar una comunicación satisfactoria con Rosetta, que escolta al cometa desde una distancia prudente, para no verse perturbada por las emisiones de gas y de polvo que suelta el mismo.
El octavo contacto, el jueves por la noche, fue más largo que los anteriores y, además, fue estable durante 12 minutos y el robot pudo enviar datos.
“Esta conexión es, de lejos, la mejor obtenida, con muy pocos cortes. Es un buen augurio para continuar, pues tal calidad de comunicación permitiría a los equipos tomar el control de Philae y manejarlo, en tanto que, hasta ahora, el robot se despierta, se apaga y trabaja de manera autónoma”, destaca el Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES, por sus siglas en francés) de Francia.
El robot realizó el 12 de noviembre de 2014 un hito histórico al aterrizar sobre el núcleo del cometa 67P/Churymov-Guerassimenko. Pudo operar durante 60 horas antes de aletargarse debido a la falta de luz suficiente para que sus baterías solares funcionaran.