Ciudad de México.- Con la presea de plata se quedó Victoria Rodríguez, pero con la historia escrita en letras de oro de una mexicana que regresó al tenis femenil a una final de singles panamericana, lo que no sucedía desde Winnipeg 1967, cuando Elena Subirats subió a lo más alto del podio.
Final atípica en Toronto, entre las dos jugadoras que más hambre de triunfo tuvieron para echar a las favoritas del tenis panamericano, Rodríguez (321 de la ITF) y la colombiana Mariana Duque Mariño (89) se disputaron el oro y aunque al final la colombiana fue mejor, el esfuerzo quedó recompensado con dos dignas medallas para ambas.
El sueño de Rodríguez no tuvo el final esperado, 4-6 y 4-6. Un juego cerrado y difícil, pero su rival demostró más precisión en los tiros, buenos ángulos y ni una bola por perdida fueron sus grandes virtudes, La mexicana, quien también tuvo su mérito para llegar hasta aquí, dio hasta donde su tenis se lo permitió.
En el primer set fue ligeramente mejor Duque Mariño, quien se lo agenció en 35 minutos de juego, Rodríguez todavía peleaba para recuperarse en la segunda manga, con un juego muy parejo que pudo ser para cualquiera hasta el 4-4, entonces la sudamericana quebró y sólo retuvo con el saque para obtener la medalla de oro.
“Llegar al primer lugar del podio lo veía como un sueño, me lo imaginaba”, dijo Victoria de 20 años en su debut en panamericanos, quien hizo historia al llevar a México a las finales de estas competencias, lo que no se había visto desde Winnipeg 1967.
“Me siento contenta por haber llegado a la final, pero triste por no haber ganado el oro, espero que para los próximos juegos me vaya mejor”, confesó.
EN DOBLES, TAMBIÉN PLATA. En su segundo partido de la jornada, Victoria Rodríguez hizo mancuerna con Marcela Zacarías para volver a caer, ahora por 1-6, 6-4 y 5-10 ante las representantes de Canadá, Carol Zhao y Gaby Dabrowski.
Aunque las mexicanas pelearon con garra al final del encuentro, un flojo inicio que tuvieron les pasó factura, ya que el primer set lo perdieron 6-1 en tan sólo 19 minutos.
Para el segundo parcial, Rodríguez y Zacarías dieron argumento para pensar en el oro con un 6-4 que les endosaron a las canadienses.
El juego se fue al tie-break, ahí de nuevo las locales parecían dominar el juego, con un 5-1 que sonaba a condena. Sin embargo las mexicana se levantó para poner el marcador 5-7, todavía abajo por dos puntos.
Vinieron momentos claves, pero no pudieron seguir con el mismo impetú ante Zhao y Dabrowski, quienes le encajaron cinco puntos consecutivos para cierra en 10-5 y agenciarse el oro del certamen.