Ciudad de México.- A tres meses para que comiencen las primarias que definirán en verano al candidato presidencial republicano, los ocho mejores candidatos afilaron ayer sus lenguas con ataques más duros contra sus adversarios.
Jeb Bush, que necesitaba destacar en el debate de ayer en Milwaukee, luego de su mediocre desempeño en los tres anteriores debates republicanos, sacó ayer pecho y se mostró más incisivo, incluso en uno de los asuntos más espinosos: qué hacer con los once millones de indocumentados.
El ex gobernador de Florida, casado con una mexicana, se mostró partidario de una reforma migratoria que abra la puerta a la ciudadanía a aquellos que cumplan una serie de requisitos; algo parecido a lo que propone el presidente Barack Obama y que apoya la más que probable candidata demócrata, Hillary Clinton.
Obsesión. Las palabras de Bush dieron pie a Trump para recurrir un debate más, al tema que le obsesiona: la inmigración y el muro en la frontera.
Trump aseguró que la decisión dada a conocer el lunes por la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito le “contentó mucho”, que fue “increíble” y que serían necesarios más fallos como ese.
“No tenemos bastantes de esas decisiones. Fue un gran día. Tenemos que detener la inmigración ilegal, que causa muchos problemas en relación a las drogas”, apuntó el magnate neoyorquino, que desde el mismo día de presentación de su campaña ha mantenido un tono belicoso en materia migratoria.
Trump se felicitó de que esta vez la Justicia fallara a favor de los conservadores, y volvió a referirse a su polémico plan de construir una muralla en la frontera entre EU y México para detener la inmigración ilegal.
“Necesitamos fronteras y tendremos una muralla. Observen Israel, la muralla funciona. Somos un país de leyes. (Los inmigrantes indocumentados) tendrán que marcharse y espero que puedan volver, pero se tendrán que marchar. No tenemos elección”, apuntó.
Sin embargo, no fue el hermano e hijo de ex presidentes quien respondió al magnate con un lenguaje más duro, sino su compañero en la tabla media de los aspirantes con más apoyo popular: John Kasich. El gobernador de Ohio arremetió contra Donald Trump, quien aprovechó para felicitar a la Corte de Apelaciones de Nueva Orleans por bloquear la iniciativa de Obama de legalizar a cinco millones de indocumentados con hijos estadunidenses.
“Piense en sus familias, piense en sus hijos”, dijo Kasich dirigiéndose a Trump. “Vamos colegas, todos sabemos que no podemos agarrar a todos los indocumentados y enviarlos al otro lado de la frontera. Es un argumento estúpido. No es propio de adultos”.